Tu mayor debilidad

El ambiente era pesado en aquel lugar al que hacen llamar Hell Grounds , un lugar un tanto sombrío, demacrado, pero…uno se va acostumbrando, después de todo, hay muchos lugares en el resto del mundo que no se diferencian tanto de este…excepto por los demonios, claro está.

Llegué aquí en busca de escapatoria, huí como cobarde de los problemas que yo mismo había ocasionado, sin penas, sin dolor,  sin compañía….Han pasado ya unas cuantas semanas desde entonces, me he ganado  un buen séquito pero, igual que siempre a donde he ido, me he ganado mis enemigos…

-Parece que has vuelto…¿Qué es lo que quieres ahora, Dorian…?- Dijo Lander mientas le miraba con la misma expresión que siempre refleja-

-¿Acaso he de querer algo para tener razones por las cuáles venir?- Dio una leve risa mientras se llevaba un cigarro ya encendido a la boca- No, no, te equivocas, en veces sólo vengo para molestar.

-Tu sola presencia me es molesta, así que no es necesario que hables…-

-Tch, eso fue duro…pero lo superaré- su risa se tornaba sarcástica, sacó su arma y despreocupadamente empezó a cargarla de balas- como sea, he decidido que ya no te daré más oportunidades, estoy muy aburrido y tu eres un buen blanco –alza el arma apuntándole mientras una sonrisa ladina se dibujó en su rostro-

Lander sólo empezó a avanzar, paso tras paso como si no le importase la existencia del arma frente a él que en cualquier momento podía ser accionada, probablemente tendría mucha confianza en su habilidad, hacer sentir el mayor temor a los humanos para poder acabar con ellos.

¿A qué le temes, Dorian? –Estiró una mano en su dirección, las finas líneas verde azuladas de su brazo brillaron tenuemente-

¿Otra vez con eso? Ya te dije, no le temo a nada, me parece algo idiota el temer –se escuchaba seguro de sí mismo, el arma seguía firme, el tiro sería preciso y exitoso si se efectuaba.

Quizás pienses que no, pero…-en un movimiento rápido logró llegar con el otro dándole un fuerte golpe en el pecho- todos tienen debilidades….

!!! M-Maldición….-el dolor le hizo sentir que el cuerpo le pesaba y perdía fuerza por lo que el arma le resbaló de la mano, sólo retrocedió unos cuantos pasos encorvándose, su respiración era notoria y  seca, una tos le seguía en pequeños momentos en los que el trataba de controlar la situación.

El miedo…es lo que vuelve a uno humano –saca una de sus navajas-  y tu…tienes miedo de terminar como nada, después de en un tiempo haberlo sido todo…

….-alzó un poco la vista y sonrío al ver la navaja- s-si vas a matarme –toma un respiro reincorporándose- vamos…hazlo, aprovecha…aprovecha que no tengo arma, que no tengo fuerza…-no duró mucho y cayó de rodillas en el suelo- …que no tengo salida

…vaya que eres idiota –guarda la navaja y le da la espalda- no es necesario, tu sólo estás matándote, eso me es más satisfactorio –avanzó unos cuantos pasos y se detuvo en seco- lo que tienes…aún tiene salvación, ¿lo sabes?-

lo sé…me lo han dicho, pero, eso involucraría papeles…dar mi nombre…una foto, serían enviadas a varios hospitales, me podrían reconocer y sería llevado a la cárcel indudablemente…je, no –niega con la cabeza- prefiero morir aquí que pudrirme en una celda

hm…-siguió avanzando sin darle mucha importancia- realmente…eres un idiota…

El chico que yacía en el suelo lucía enojado ante aquellas palabras, con las fuerzas que tenía alzó su arma nuevamente y le disparó al demonio, sin embargo, el disparo sólo le dio en el hombro.

…-se lleva la mano a la herida viendo su sangre de color traspasarse por la ropa- trataste de matarme después de que yo te perdone la vida…¿Qué clase de humano eres? –Siguió avanzando sin importancia-

hm…uno que preferiría no serlo…-el dolor en su pecho se tornó pulsante y cayó por completo al suelo cerrando los ojos y respirando lentamente-

El peor enemigo del humano…es el mismo humano…ahora lo entiendo